De todos los recursos de los que depende la fabricación moderna, la energía es sin duda uno de los más importantes. La eficiencia energética y, por tanto, la huella de carbono son un importante indicador de la contribución de las empresas a la sostenibilidad y la protección del clima. De hecho, la industria manufacturera busca cada vez más productos fabricados de forma sostenible y considera esta cuestión como un componente esencial en sus decisiones de compra. La energía también es un recurso que durante mucho tiempo se ha dado por sentado, pero el aumento de los precios y la preocupación por las emisiones de gases de efecto invernadero están haciendo que los operadores evalúen críticamente cómo producir más con menos recursos. La clave para conseguirlo es cambiar a LinMot y eliminar las pérdidas de energía en los procesos de automatización de fábricas que consumen mucha energía, como las aplicaciones neumáticas (aire comprimido).
Las empresas utilizan los actuadores neumáticos por su coste de inversión algo menor. Sin embargo, el aire comprimido es uno de los medios energéticos más caros, ya que los compresores sólo pueden convertir una pequeña parte de la energía de entrada en potencia útil. La mayor parte se disipa en forma de pérdidas de calor. En cambio, LinMot se basa en motores lineales tubulares sin escobillas de accionamiento directo con una eficiencia extremadamente alta. Además, y a diferencia de la neumática, el motor lineal no sólo no consume energía más allá de lo necesario, sino que puede convertir la energía durante el frenado y almacenarla para el siguiente ciclo. Debido a los elevados costes de funcionamiento de los cilindros neumáticos, los motores lineales resultan ser una alternativa rentable en la que el mayor coste de inversión puede amortizarse en cuestión de semanas. No es de extrañar, pues, que cada vez más empresas intenten eliminar el aire comprimido de sus fábricas.
Varios estudios demuestran que los motores lineales son preferibles a los sistemas optimizados de aire comprimido, tanto en términos de ahorro económico como ecológico. US cotton, un fabricante de bastoncillos de algodón, decidió sustituir sus cilindros neumáticos por motores lineales LinMot y medir si el ahorro de energía justificaba realmente el precio de los motores LinMot. El motor lineal sólo consumía el 3,2% de la energía del cilindro neumático equipado en la máquina. Además, el mejor control también supuso un aumento del 35% en la velocidad de la máquina, y la ausencia de ajustes o sustitución de los motores lineales significa un funcionamiento sin problemas durante muchos años.
Si calculáramos la factura eléctrica anual y las emisiones de CO2 del ejemplo anterior, en el que la distancia total de desplazamiento por ciclo es de 800 mm y el tiempo total del ciclo es de 900 ms, obtendríamos los siguientes resultados:
Consumo eléctrico (kWh) al año para un solo eje |
Factura eléctrica (euros) al año para un solo eje |
Emisiones de CO2r (KG) al año para un solo eje |
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Cilindro de aire | 21’250 | 3’612 | 10’625 |
Motor LinMot | 680 | 115 | 340 |
Reducción anual | 20’570 | 3’497 | 10’285 |
Para una línea de producción que utilice 100 cilindros neumáticos, esto supondrá un ahorro anual de 349.700 euros sólo en gastos de electricidad. La reducción de CO2 es suficiente para conducir un Ferrari Roma 110 veces alrededor del mundo. |
Además de conseguir un importante ahorro de energía, también se reducen los costes al no haber componentes mecánicos de transmisión (cajas de cambios, correas dentadas, poleas, levas, tornillos de cabeza, etc.), lo que permite un montaje mecánico más limpio, menos piezas y un funcionamiento más suave y silencioso. El coste total de propiedad (TCO) también se minimiza por la reducción de los costes logísticos y de instalación debido a un número mínimo de componentes estándar. Los costes de producción también se reducen debido al mayor rendimiento, la mayor fiabilidad de los movimientos, la mejora del tiempo medio entre fallos (MTBF) y la reducción drástica de los costes de mantenimiento y sustitución.